Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; teme a Jehová y apártate del mal. — PROVERBIOS 3:6-7
La contraparte de esta escritura en el Nuevo Testamento es 2 Corintios 10:4 y 5.
2 CORINTIOS 10:4-5
4 Porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para la destrucción de fortalezas ,
5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.
El versículo 4 dice “armas”, en plural . ¿Cuáles son algunas de estas armas? El versículo 5 menciona una de ellas: derribar imaginaciones o razonamientos. Se nos dice que derribemos imaginaciones o razonamientos que se exaltan contra el conocimiento de Dios.
Si quieres andar por fe, la Palabra de Dios debe ser superior al conocimiento humano natural, ya sea que ese conocimiento sea tuyo, mío o de otra persona. Recuerda, Proverbios 3:7 dice: “No seas sabio en tu propia opinión…” Una traducción dice: “No seas sabio en tus propios conceptos”. Esto se refiere a tu propio pensamiento o razonamiento humano natural.
Ya ves, si la Palabra ha de obrar en ti, debe ser superior a todo razonamiento humano, porque el conocimiento humano —el conocimiento sensorial— siempre es limitado. La mente aprende a través de los sentidos físicos; está entrenada de esa manera. Por lo tanto, nadie tiene un conocimiento humano perfecto. Pero la Palabra de Dios es perfecta. Si vas a andar por fe, tendrás que conformarte con la integridad de la Palabra de Dios.
Confesión: Derribo todo aquello que se levanta contra el conocimiento de Dios. En lugar de seguir mis propios razonamientos humanos naturales, sigo la Palabra de Dios y sigo caminando en fe.
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