¿Cómo conciliamos entonces los versículos anteriores de Deuteronomio 28? ¿Dios da enfermedades y mata en el Antiguo Testamento, pero sana y da vida en el Nuevo Testamento? He aquí la buena noticia:
El Dr. Robert Young, autor de Young's Analytical Concordance y Hints To Bible Interpretation, señala que en el hebreo original (el Antiguo Testamento fue escrito en hebreo), el verbo está en sentido permisivo y no causativo.
Por lo tanto, Deuteronomio 28:27 debería haberse traducido algo así como: "El Señor permitirá/permitirá que estas plagas caigan sobre ti".
El hebreo original de estas escrituras estaba en el tiempo permisivo, pero debido a que el idioma inglés no tiene un tiempo permisivo correspondiente, los verbos fueron traducidos en el tiempo causativo.
Por tanto, no hay contradicción. El Dios del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento es el mismo Dios que "te sana" -- Jehová Rapha. (Éxodo 15:26) Él no cambia. (Malaquías 3:6, Hebreos 13:8)
Las enfermedades, accidentes y muertes provienen de Satanás (Juan 10:10), no de Dios. Dios puede levantar Su mano de protección y permitir que estas cosas vengan sobre Sus hijos, pero Él no es el instigador de ellas. Dios no es el autor de la confusión, sino de la paz. (1 Corintios 14:33)
Dios tampoco es un maltratador de niños. Él no castiga ni educa a Sus hijos con cosas tan horribles. El los castiga con Su Palabra a sus espíritus. (Ver Con Su Palabra, a nuestros espíritus).
Redimidos de todo tipo de enfermedad
Bajo el sistema de ley del Antiguo Pacto, Dios bendice a Su pueblo si obedecen Sus leyes, pero permite que terribles maldiciones vengan sobre ellos si no lo hacen. (Deuteronomio 28:1,15)
En Deuteronomio 28, hay 11 versículos de bendiciones (versículos 3 a 13) y 53 versículos de maldiciones (versículos 16 a 68). (versículos 16 al 68) Como aquí hay más maldiciones que bendiciones, le corresponde al cristiano estudiar cuáles son estas maldiciones, ¡no sea que llame a algo bendición cuando es una maldición!
Una de las maldiciones es:
Deuteronomio 28:61
61 Y toda enfermedad y toda plaga que no está escrita en el libro de esta ley, Jehová la traerá sobre ti, hasta que perezcas.
Note que dice "toda enfermedad y toda plaga". Esto significa que toda enfermedad es una maldición, nunca una bendición como algunos cristianos creen. Entonces, si usted dice que su enfermedad es una bendición de Dios, usted está contradiciendo Deuteronomio 28:61, que implica que cualquier enfermedad es una maldición.
Pero alabado sea Dios porque por la obra de Cristo en la cruz, hemos sido redimidos de las maldiciones de la ley, incluyendo Deuteronomio 28:61.
Gálatas 3:13
13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición; porque escrito está: Maldito todo el que es colgado en un madero:
En otras palabras, la curación forma parte de la obra redentora de Cristo. La curación es parte de la expiación. (Isaías 53:4, Mateo 8:17 y 1 Pedro 2:24) (Véase Salud y sanación).
Entonces, ¿cómo podemos decir que Dios castiga a Sus hijos con enfermedades? Si eso fuera cierto, ¡Dios estaría yendo en contra de la obra de Su Hijo! Tampoco podemos decir que Dios escoge sanar a unos y no a otros porque el hecho es que la sanidad es ofrecida a todos a través de la cruz. Si decimos que Dios está dispuesto a sanar sólo a algunas personas, es como decir que Dios está dispuesto a salvar sólo a algunas personas.
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