Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. — ROMANOS 8:14
Los hijos de Dios pueden esperar ser guiados por el Espíritu de Dios.
Los creyentes pueden esperar ser guiados por el Espíritu Santo. Jesús, refiriéndose al momento en que vendría el Espíritu Santo, dijo: “Él os guiará”. Así que no tenemos que recurrir al hombre para recibir orientación, eso no es bíblico. Todos los hijos de Dios tienen el Espíritu de Dios en su interior y pueden esperar ser guiados por Él.
En febrero de 1959, Jesús se me apareció en una visión abierta. Oí sus pasos entrando en mi habitación del hospital. Se sentó en una silla junto a mi cama y me habló durante una hora y media acerca del ministerio de un profeta. Una de las cosas que dijo fue: “El ministerio del profeta no está establecido en la Iglesia para guiar a los miembros y decirles qué hacer. Bajo el Antiguo Pacto, la gente acudía al profeta para buscar consejo, dirección u orientación, porque él tenía el Espíritu de Dios y ellos no. Nadie bajo el Antiguo Pacto, excepto el rey, el sacerdote y el profeta, tenía el Espíritu Santo sobre ellos. La gente no sabía nada acerca de la dirección del Espíritu. Pero bajo el Nuevo Pacto no dice: “Todos los que son guiados por los profetas, son hijos de Dios”. Dice: “Todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, son hijos de Dios”.
Confesión: Soy hijo de Dios. Puedo esperar ser guiado por el Espíritu de Dios. Él me está guiando ahora.
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