El vino a declararlo

 Ningún hombre ha visto a Dios en ningún momento; el Hijo unigénito, que está en el seno del Padre, él lo ha declarado. — JUAN 1:18

Cómo Jesús se dio cuenta y apreció la fase de Su misión en la tierra: ¡Declarar la verdadera naturaleza de Su Padre!

Un renombrado erudito de la Biblia dijo una vez con respecto a la Encarnación: “Ahora sabemos que Dios es así como lo hemos visto en Jesús. Él es como Cristo. Y si lo es, es un Dios bueno y digno de confianza. Si el corazón que está detrás del universo es como este corazón tierno que se partió en la Cruz, Él puede tener mi corazón sin reservas y sin reservas. No sé nada mejor que decir de Dios que Él debe vivir como Cristo. . . . Extraño, un hombre vivió entre nosotros y cuando pensamos en Dios pensamos en Él en términos de este hombre o Él no es bueno. Podemos transferir cada cualidad moral de Jesús a Dios sin pérdida o degradación de nuestro pensamiento de Dios. Por el contrario, al pensar en Él en términos de Jesús, elevamos nuestra visión de Dios. Todos aquellos que han tratado de pensar en Él en otros términos han rebajado y empobrecido nuestra idea de Él”.

Confesión: Jesús me ha declarado Dios Padre. Sé cómo es Dios: ¡es como Jesús! Dios es un Dios bueno, y confío en Él.