Reunión de lectura Biblica

TITO 3 Justificados por gracia 3  Recuérdales que se sujeten a los gobernantes y autoridades, que obedezcan, que estén dispuestos a toda buena obra.   2  Que a nadie difamen, que no sean pendencieros, sino amables, mostrando toda mansedumbre para con todos los hombres.   3  Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros.   4  Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres,   5  nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo,   6  el cual derramó en nosotros abundantemente por Jesucristo nuestro Salvador,   7  para que justificados por su gracia, viniésemos a ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna. GALATAS 1 No hay otro evangelio 6  Estoy asombrado

  Paso 4: Cuéntalo Oh, dad gracias al Señor;  invocad su nombre; haced notorias sus obras entre los pueblos.  Cantadle, cantadle salmos: hablad de todas sus maravillas.  — SALMO 105:1,2 Paso 4: Dilo.  Esta mujer, ".  .  .  sabiendo lo que había sucedido en ella, vino y se postró delante de él, y le dijo toda la verdad  ” (Marcos 5:33).  No solo Jesús la escuchó, sino que toda la multitud la escuchó.  Jesús me dijo acerca de este paso: “Cuéntalo para que otros lo crean y lo reciban”. Hay una diferencia entre este paso y el primer paso.  La primera es,  Dilo  .  Este cuarto paso es  Cuéntalo  . La mujer  dijo  lo que creía.  Luego, después de recibir,  contó  lo que le había sucedido. 1. Dilo. 2. Hazlo. 3. Recíbelo. 4. Cuéntalo. Le pregunté a Jesús, cuando me dio estos pasos, "¿Me estás diciendo que cualquier creyente, en cualquier lugar, puede escribir un boleto de victoria sobre el mundo, la carne y el diablo?" “Enfáticamente, sí”, respondió Jesús.  “Y si no lo hacen, no

  Paso 2: Hazlo De qué sirve, hermanos míos, si un hombre profesa tener fe, y sin embargo sus acciones no corresponden. . . . alguien dirá: “Tú tienes fe, yo tengo acciones: pruébame tu fe aparte de las acciones correspondientes y yo te probaré la mía con mis acciones. . . .” Notas que su fe [la de Abraham] estaba cooperando con sus acciones, y que por sus acciones su fe fue perfeccionada.  — SANTIAGO 2:14,18,22 (Weymouth) Paso 2: Hazlo.  No le habría hecho ningún bien a esa mujer con el flujo de sangre haber dicho: “Si puedo tocar Su ropa, seré salva”, si no hubiera  actuado  de acuerdo con lo que dijo. Jesús me dijo en esa visión: “Tus acciones te derrotan, o te hacen triunfar en la vida. De acuerdo con tus acciones, recibes o se te impide recibir”. Eso es importante. Leelo de nuevo. El Libro de Santiago está escrito para los  creyentes  .  Santiago dijo: “ Hermanos míos  , ¿de qué aprovecha ?”. La mayoría de la gente piensa que Santiago estaba escribiendo a personas no salvas, p

Porque ella dijo: Si puedo tocar tan solo sus vestidos, seré sana. Y luego la fuente de su sangre se secó; y sintió en su cuerpo que estaba sana de aquella plaga. . . . Y él [Jesús] le dijo: Hija, tu fe te ha salvado; Ve en paz, y queda sana de tu plaga.  — MARCOS 5:28,29,34 En 1953  un profeta llamado Kenneth Hagin  tuvo una visión en donde el  Señor  Jesucristo le  reveló un principio clave para siempre recibir las peticiones de oración basadas en la escrituras. El Señor le dijo que tomara lápiz y papel y que escribiera 1, 2, 3, 4. Luego dijo: “Si alguno, en cualquier lugar, da estos cuatro pasos, o pongan en práctica estos cuatro principios, siempre recibirán lo que quieran de Mí, o de Dios Padre.” Los pasos que Jesús me dio son simples. Ellos son (1)  Dilo  ; (2)  Hazlo  ; (3)  Recibirlo  ; y (4) Cuentalo  . Jesús usó la sanidad de la mujer con flujo de sangre para ilustrar estos cuatro pasos. Paso 1: Dilo.  ¿Cuál fue el primer paso de la mujer para ser sanada? “  Porque ella DIJ

Y luego la fuente de su sangre se secó;  y sintió en su cuerpo que estaba sana de aquella plaga.  Y Jesús, sabiendo en seguida en sí mismo que la virtud había salido de él, le dio la vuelta en la multitud, y dijo: ¿Quién tocó mi ropa?  — MARCOS 5:29,30 Jesús sabía que el  poder  había salido de Él.  En ese momento, Jesús era el único representante de la Deidad obrando sobre la tierra.  Fue ungido con el Espíritu Santo (Hechos 10:38).  En ese día, para llegar a donde estaba el poder, había que ir a donde estaba Jesús.  Hoy, el Espíritu Santo en la Persona de la Deidad está obrando sobre la tierra.  Él está presente en todas partes, y dondequiera que esté el Espíritu Santo, hay  poder  . Las bombas nucleares liberan radiactividad a la atmósfera, un poder que no se puede ver ni sentir, pero un poder que es a la vez peligroso y mortal.  Sin embargo, hay un poder obrando sobre la tierra en este momento que no es ni peligroso ni mortal;  un poder que es bueno, que sana y que libera a los hom

  Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo: y esta es la victoria que vence al mundo, nuestra fe.  — 1 JUAN 5:4 Puedo estar en el mundo, pero no soy del mundo.  soy de Dios  Mi ciudadanía está en el Cielo.  Y mientras estoy en este mundo, tengo al Mayor viviendo en mí.  Mayor es el que está en mí, que el que está en el mundo (1 Juan 4:4). ¿Quién está en el mundo?  El diablo.  Se le llama el dios de este mundo en 2 Corintios 4:4. ¿Qué hay en el mundo?  Pecado.  Pero el Mayor en mí es mayor que el pecado.  El Mayor conquistó el pecado. ¿Qué más hay en el mundo?  Enfermedad.  No es de Dios.  No viene del Cielo.  Allá arriba no hay enfermedad.  La enfermedad es de este mundo.  Pero el Mayor en mí es el Sanador. ¿Qué más hay en el mundo?  Problema.  Circunstancias adversas.  Imposibilidades aparentes.  Pero cuando he enfrentado tales cosas, solo he recordado quién está dentro de mí y lo que dice la Biblia.  Ni siquiera tuve que orar al respecto.  Simplemente miré esa circunstanci